La pandemia transformada en crisis sanitaria, económica y social ha profundizado las desigualdades preexistentes de nuestras sociedades. Esto invita analizar las consecuencias del virus por fuera del modelo biomédico. Quien sufre la epidemia y las enfermedades es la sociedad por ello requerimos de abordajes desde una dimensión colectiva y no desde el modelo individualista que produce respuestas que no todos y todas, estamos en la posibilidad de poder asumir.
“Proud Boys, retrocedan y estén alerta”. “Retrocedan, pero estén alerta”. Sí, estas palabras pronunció ante los ojos de la Nación el presidente Donald Trump en su primer debate presidencial con Joe Biden. El moderador de Fox News, Chris Wallace, le había pedido a Trump que condenara a los supremacistas blancos.
En aquel entonces Viriato Fiallo se perfilaba como el seguro vencedor de las elecciones del 20 de diciembre del año 1962. El 11 de julio del año anterior había fundado la Unión Cívica Nacional y el 8 de febrero del ’62 la convirtió en partido político.
“Él es el recolector de úteros”, le dijo una mujer inmigrante detenida a Dawn Wooten, enfermera de una cárcel del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por su sigla en inglés) operada por la empresa privada de gestión de cárceles LaSalle Corrections.
En el Siglo VIII, antes del cristianismo, Amós profetizó al pueblo de Israel usando la plomada que, según él, Dios usaba para ver cómo es de recta la conducta del pueblo, y para medir la profundidad de la crisis de la justicia, la corrupción, la violencia y la insensibilidad que prevalecía en el reino.
La declaración jurada de bienes, viene desde el año 1961. El texto legal obligaba a los funcionarios públicos, sean entrantes o salientes, jurar por escrito sobre los bienes que poseían al asumir el cargo y los que poseen al salir del mismo.
Este artículo de parte de un panel con la participación del Obispo Telésforo Isaac, Iglesia Episcopal Anglicana; el P. Miguel José Vásquez, director de la Revista el Amigo del Hogar; Licenciada Miguelina Justo, Psicoterapita, articulista y conferencista y la señora Ramona Ramos, miembro del grupo de apoyo Sendero.
Una tarde de domingo mientras dormía una afable siesta, bajo el pegajoso calor de otoño, mis ojos se resplandecían al verla mientras dormía un profundo y reconfortante sueño, al tiempo que valoraba sus expresiones de tranquilidad y seguridad, mientras iba al encuentro de Morfeo.
Septiembre comienza a decaer. Como el otoño, va dejando caer sus hojas para recordarnos dulcemente que la Navidad está cerca. Al pensar en ello, reparamos en lo extraño que sido este año. Cada día ha marcado un nuevo adiós: se han perdido las costumbres, la rutina y hasta la forma de expresar los afectos. Nada, absolutamente nada, ha quedado indemne.
La pandemia nos mantiene todavía circunscritos a escuetos espacios personales, mudando las prácticas sociales habituales al terreno de los gestos sospechosos. Pero para bien o por mal, los dominicanos nos las arreglamos y creamos maravillas. De ahí que la Covid-19 implantó sus postes en el país y algunos de nosotros, en tiempo récord, nos los hemos saltado.
El papel de la prensa libre es hacerle rendir cuentas al poder, especialmente cuando aquellos poderes están involucrados en una guerra. Sin embargo, es la propia libertad de prensa la que está siendo juzgada actualmente en Londres mientras Julian Assange, fundador y editor en jefe del sitio web de denuncia Wikileaks, lucha contra la extradición a Estados Unidos por una serie de cargos de espionaje y piratería informática que van cambiando constantemente.
“La realidad es que antes del virus, la “normalidad” a la que popularmente tanto se añora volver provocaba los niveles de desigualdad que hoy vemos y sufrimos… pensar cómo enfrentar esta crisis tanto en su contexto local como mundial nos da la oportunidad de provocar construir los cambios y transformaciones positivas y necesarias para beneficio de todas y todos”
La Liga Municipal Dominicana nace en diciembre del año 1938, por cuanto cumplirá 82 años, un tiempo más que suficiente para alcanzar la madurez institucional.















