Se prevé que el cambio climático haga que los fenómenos como la DANA sean más intensos debido al calentamiento de las aguas del mar y al aumento de la humedad en la atmósfera, advierte la agencia de meteorología.
Unas lluvias e inundaciones repentinas sin precedentes han asolado España, causando decenas de víctimas y pérdidas económicas. Se trata de la última de una serie de catástrofes por inundaciones que han afectado a comunidades de todo el mundo, señaló la Organización Meteorológica Mundial (OMM) este jueves.
Según la agencia, el suceso "pone de relieve por qué la máxima prioridad de la comunidad de la OMM es salvar vidas a medida que el cambio climático potencia las condiciones meteorológicas extremas”.
La Comunidad Valenciana ha sido la más afectada, con muchos lugares que recibieron más de 300 l/m². Los días 29 y 30 de octubre, una estación meteorológica de Chiva recibió 491 l/m² en sólo ocho horas, el equivalente a un año de precipitaciones, según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
El número de víctimas mortales supera ya las 150. Las imágenes del suceso muestran a personas arrastradas por el agua en coches y furiosos torrentes de agua mortal. Decenas de miles de valencianos se han quedado sin electricidad y el transporte quedó interrumpido. El gobierno español declaró tres días de luto nacional.
La AEMET, que es la fuente oficial de alertas autorizadas en España, emitió numerosas alertas en virtud del Protocolo de Alerta Común. Entre ellos, alertas ámbar y roja de máximo nivel por lluvias torrenciales continuadas en el este y el suroeste de España. El aeropuerto de Jerez, en el suroeste de España, recibió el 30 de octubre la cifra récord de 114,8 mm de lluvia en 24 horas.
Fortalecer la iniciativa Alerta Temprana para Todos
La OMM colabora con sus miembros, los Servicios Meteorológicos e Hidrológicos Nacionales, para garantizar que las previsiones exactas y oportunas lleguen a tiempo a la población y permitan actuar con prontitud. “Nuestra misión principal es salvar vidas y medios de subsistencia, y esto es lo que impulsa la iniciativa internacional Alerta Temprana para Todos”, señaló el organismo.
Otras partes de Europa también se han visto gravemente afectadas por las inundaciones este año. A mediados de septiembre de 2024, una región muy extensa de Europa Central experimentó lluvias muy intensas, batiendo récords de precipitaciones locales y nacionales.
El Instituto Meteorológico Noruego alertó de un fenómeno del tipo “río atmosférico” que afectará a los países nórdicos el 31 de octubre y el 1 de noviembre.
El papel del cambio climático
Según el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático, los fenómenos meteorológicos extremos que provocan inundaciones y sequías de gran impacto son cada vez más probables y graves debido al cambio climático antropogénico. Y así lo confirman los sucesos.
“Como consecuencia del aumento de las temperaturas, el ciclo hidrológico se ha acelerado. También se ha vuelto más errático e impredecible, y nos enfrentamos a problemas crecientes de exceso o escasez de agua. Una atmósfera más cálida retiene más humedad, lo que favorece las lluvias torrenciales”, declaró la secretaria general de la OMM, Celeste Saulo.
El fenómeno que afectó a España -conocido como Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA)- suele producirse durante la estación otoñal porque el calor superficial que queda del verano se encuentra con una repentina invasión fría en el aire procedente de las regiones polares. Esto da lugar a lo que los meteorólogos solían llamar '''un sistema de corte''' con valores de bajas presiones que persisten durante unos días y que rotan sobre la región afectada. También afectó al sur de Francia.
“La presencia de aire cálido cerca de la superficie alimentado por el exceso de humedad del mar Mediterráneo, aún caliente, y la inestabilidad generada por el conflicto con el aire frío de la atmósfera superior dan lugar a grandes nubes convectivas con fuertes aguaceros y repentinas inundaciones repentinas”, explica el responsable de Vigilancia del Clima de la OMM.
“Se prevé que el cambio climático haga que estos sistemas sean más intensos debido al calentamiento de las aguas del mar y al aumento de la humedad en la atmósfera”, añadió Omar Baddour.
Por cada 1°C de calentamiento, el aire saturado contiene entre un 7 y un 9% más de vapor de agua por término medio. Este aumento de la humedad atmosférica incrementa el riesgo de precipitaciones extremas.